Acabo de tomar mi refrigerio de Nochevieja, algo de pavo mientras otros se ajustan los tirantes y la pajarita para hacerlo y otros el pelo de la dehesa para no parecerlo. Danzad malditos es un film de 1.969 dirigido por Sydney Pollack basado el libro de Orace MacCoy llamado “They sooht Horses, Don´t They?”. Que de qué va? pues si no la han visto ni leído véanla o léanlo en el rincón del vago; es un relato patético y dramático sobre la Gran Depresión de los años 30. Les adelantaré que el argumento se basa en los maratones de baile que se organizaron con el falso propósito de ofrecer una esperanza a los ciudadanos que padecían desempleo y falta de dinero. Algo muy parecido a lo que muchos de ustedes y ustedas van a realizar durante lo que queda de la velada. Todavía nos agarramos a la orquesta del salón mientras ahí fuera siguen tirando bengalas y algunos ya comienzan a botar las chalupas entre los quejidos de la sirena que, en forma de campanadas, anuncia desesperada el hundimiento del Titanic. Bailen como malditos esta noche mientras les duren los vapores del alcohol, el confeti y el falso oropel de esta Europa que se hunde en su propia mierda moral. Cuando mañana se despierten encima del salvavidas entre la niebla y el frío matutino, vayan pensando en leer el BOE y si no saben porque su maestro no les dio los suficientes cachetes para que aprendieran, al menos les servirá para estofarlo y celebrar con lo la familia que aún no se haya divorciado o haya marchado a Alemania, Pepe. De paso se me ponen la TVE1 y se marca un paso de oca con el hijoputa de Radetzky par ir cogiendo comba con lo que viene. Felices sueños y que San Picolín les ampare.
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